El tipo en cuestión, andrajoso y repugnante, se encontraba conversando con la pared a cerca del uso de la coma de Tolstoi y Wilde.
El joven de las gafas de pasta se acercó para observar mejor este espectáculo.
Cuando el vagabundo reparó en su presencia, le pidió opinión sobre el tema, que no le permitía dormir. Me parece perfecto, dijo este, mientras no la pongan entre el sujeto y el predicado.
Este tipo no.. tenía nadad de... especial....
ResponderEliminarhoy me ha llamado la atención repetidas veces en clase por alborotador jajajaja.